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Bitácora 4. Oda, el lujo consciente

  • Foto del escritor: María Alejandra Botero
    María Alejandra Botero
  • 29 abr
  • 1 Min. de lectura

Tiempo de lectura: 2 minutos


Mujer sonriendo

En una sola frase, en Oda exaltamos nuestra riqueza agrícola de manera consciente. Una oda —como su nombre lo sugiere— a lo local, al cuidado de la tierra y a los agricultores que la trabajan con dedicación y respeto.


Para nosotros, la experiencia gastronómica se basa en una construcción cocreada, construida junto a huertas urbanas, campesinos y emprendedores que comparten nuestra visión. Con ellos, integramos prácticas socioambientales responsables que no solo nutren nuestra propuesta, sino también el territorio que habitamos.


Oda representa el lujo consciente.


No el lujo tradicional, sino el lujo de saber de dónde vienen nuestros ingredientes, de alimentarnos con productos frescos cultivados con intención y cuidado. El lujo de ser parte de una cadena que honra a quienes trabajan la tierra con sabiduría y entrega.




Nuestra propuesta de platos a la carta está pensada para compartirse al centro de la mesa, celebrando la diversidad de sabores y la riqueza de nuestra tierra en un formato que se siente cercano y familiar.


Somos un restaurante fine casual dining, donde los sabores de nuestra cocina resultan familiares para los paladares locales, pero también logran sorprender a nuestros comensales internacionales.


Y es que cada decisión —desde la selección de los ingredientes hasta la manera de operar— está guiada por un propósito claro: dejar una huella positiva en el entorno, en las comunidades y en la cultura gastronómica del país.


Los esperamos para descubrir nuestra propuesta.





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